Guerra con Hamás – Día 201

Tercer Tiempo.

Arranquemos con los secuestrados. La gente presiona e insulta al gobierno. Y está bien. No sea cosa que se queden en sus casas esperando buenas (o malas) noticias y eso le transmita al gobierno el mensaje de que pueden tomarse su tiempo, digamos, unos 5 años como con Guilad Shalit, para negociar la salida. Aunque por otro lado, quiero creer que los familiares no piensan REALMENTE lo que dicen cuando exigen que se les de a Hamás LO QUE SEA a cambio de sus seres queridos. Porque todos sabemos, o al menos los que criamos algún que otro hijo, que a veces hay que poner el límite firme, porque sino, es pan para hoy, hambre para mañana. Y hambre para mañana puede querer decir otro 7-10.

Vamos al grano en lo militar. Se dice que se prepara una entrada a Rafiah, que es el último bastión al que -además de a los civiles- el Ejército Israelí dejó escapar a todos los terroristas en esta guerra ridícula en la que le damos tiempo al enemigo a esconderse entre los civiles, en hospitales, en escuelas. Como si fuese una película de Guy Ritchie en la que al final nos vamos a enterar de que estaba todo arreglado con Sinwar para que éste firme acuerdos secretos de paz que se vienen redactando desde hace un año, y todo lo demás fue una pantalla para que el pueblo palestino sienta que «se ganó su país en una guerra» y no que se la dieron a modo limosna. Y ahora que lo escribo, no me suena tan ridículo.

Rafiah está a un pasito de Egipto y si los civiles tienen que evacuarse, ya no hay «más al sur» a dónde irse, por lo que mi sueño de que irrumpan y quiebren el límite con el país de los faraones y se establezcan allí de por vida, podría ser también un escenario hermoso para todos. Y si leemos en las noticias que altos representantes del gobierno y las fuerzas de seguridad estuvieron en Egipto ayer, quien te dice que mi sueño no es como el de Martin Luther King, que al final se cumple.

En otro orden de cosas, renunciaron dos altos puestos en el rango militar por considerarse responsables del fracaso defensivo del 7-10. Y por un lado la gente pide a gritos que los que estaban al mando se hagan responsables y se retiren de todos los puestos decisivos del ejército y de los puestos de seguridad. Lo piden tan enfáticamente como si supieran que el segundo o tercero en el mando son mucho mejores. Quizás los que asumen en los lugares de sus renunciantes son unos novatos que están cagados en las patas y están rogando que no les toque salir a la cancha justo ahora. O quizás son unos Scaloni que nos van a sorprender y nos ponen la tapa a todos resolviendo esta maraña de manera sorpresiva.

En el otro frente, en charlas supersecretas que ya las sabe hasta Lali Espósito, parece que la semana que viene se arma la maroma en el norte. Después del cachetazo a Irán, que puso un poco de paños fríos al asunto, a mí me hizo pensar que quizás Irán no sea ese cuco del que hablan y quizás esté inflado como en su momento la Unión Soviética, como todo enemigo al que se infla para justificar acciones locales, presupuesto de defensa, o mantener a la gente con cierto miedo que los haga responder como un rebaño. Quizás llegó el momento de limpiar el sur del Líbano de manera total.

Lo que venía a ser un post pesimista de «no pasa nada, seguimos en el barro» terminó siendo un post de un escritor que no deja de tener su lado cinematográfico en la cabeza. Y quién te dice que mi mente creativa finalmente no la pega con alguno de los locos pronósticos que terminan con la copa en nuestras manos, alzada y celebrando.

Guerra con Hamás – Día 195

Ataque Israelí en Irán.

Mientras todos nos sonreíamos viendo el jueguito de «agarrame que lo mato», en el que Israel se hacía el malo diciendo que los íbamos a reventar, y el resto del mundo, especialmente EEUU nos agarraban para que no hagamos ninguna cagada que pueda desencadenar una guerra; mientras en Israel decían que la respuesta israelí iba a llegar después de Pesaj, y EEUU se ocupaba de que al menos no ataquemos las instalaciones nucleares; mientras todo parecía una fantochada en la que faltaba que le digan a qué hora y dónde iban a atacar, los pilotos de la excepcional Fuerza Aérea Israelí lo hicieron de nuevo.

A eso de las 3:30 de la mañana, y sin que pudieran defenderse ni saber que algo se les venía (a diferencia del sistema de defensa israelí, que apenas salieron los cohetes y los drones, ya todos sabíamos a qué hora llegaban los visitantes) Israel atacó la base militar de Isfahan, a 450 km de Teherán.

No se tienen muchos datos por el momento. Se puede decir que el ataque es simbólico porque desde esa base que fue atacada, salieron los drones y misiles que el último sábado atacaron a Israel. La televisión iraní, como en los mismos tiempos de la guerra con Irak, o como la televisión de propaganda rusa, muestra imágenes de Irán por las calles haciendo vida normal e intentando demostrar que todo sigue como siempre y que no ha pasado nada. Puede ser que no haya pasado nada porque los iraníes, advertidos del ataque israelí, vaciaron sus bases militares y evacuaron sitios clave en Siria.

Podría decir que en Irán no se esperaban una respuesta. Creo que Irán confía demasiado en su propaganda y sus desfiles militares y sus clásicas declaraciones en las que amenazan con hacer desaparecer al pueblo judío. Pero si vimos suficientes películas, nosotros aprendimos que si vas a golpear, entonces no hables. O quizás un perro que ladra no muerde.

Acá lo importante es que Israel no hizo caso a la hipocresía mundial. Ayer en la ONU, el ministro de relaciones exteriores de Irán decía que no iban a tolerar ningún ataque israelí, y que iban a responder cualquier agresión de manera enfática. ¡Caradura! ¡Caradura él y caraduras todos los representantes de los países en la ONU que no saltaron a interrumpirle el discurso y gritarle que es un hipócrita! ¿Cómo se puede poner en víctima cuando salieron 300 misiles con objetivo en Israel hace 6 días? Y el mundo haciéndose el pelotudo. Y por eso mismo, justamente por eso mismo, está bien que Israel haya atacado. Para que el mundo sepa que no nos van a tocar nunca más el culo. Que nosotros no somos bocones que hablamos al pedo. Que a pesar de que el mundo mire para el costado, y que nosotros pertenezcamos al mundo «occidental y civilizado», por encima de todo eso hay una frase que aunque estemos solos en la parada, la vamos a gritar bien fuerte: NUNCA MAS ES YA.

Guerra con Hamás – Día 192

Un Post Importante para la Sociedad Israelí.

Ahora se habla de una respuesta israelí a la respuesta iraní. Si tengo que apostar, vamos a atacar en el Líbano, para matar dos pájaros de un tiro. Pero eso lo veremos. Lo importante que venía a decir, lo digo acá abajo.

Los que me conocen bien, saben que yo suelo repetir frases hasta el cansancio. Hay quienes dirán que soy cabeza dura. Otros entenderán más profundamente que se trata de mis convicciones. Cosas que yo creo ciertas y a las que apoyo con los hechos que encuentro a mi alrededor.

Una de esas cosas, por ejemplo, es que todas las decisiones que se toman en el gobierno israelí, absolutamente todas, están consensuadas con el gobierno de EEUU, quienquiera sea el presidente de turno. Porque así funciona nuestra sociedad. Es como con los hijos: vos vas a apoyar siempre a tu hijo, siempre que no le tire un borrador por la cabeza a la maestra. Y así es con EEUU. Están con nostros, pero manejando los hilos para que no hagamos cagadas.

Y ahora nos remontamos un año y pico atrás, cuando empezaron las manifestaciones en Israel. Mi entorno me reclamaba que me sume, que vaya todos los sábados a la plaza. Y yo no iba. No por estar en contra de lo que se reclamaba, sino porque no creía en la urgencia y la gravedad de lo que vendían como un futuro negro. No creía que eso fuese a pasar. Yo decía que esas leyes, tal y como las proponía Netaniahu, no iban a pasar. (Y no pasaron, dicho sea de paso). Porque EEUU no lo iba a permitir.

Los manifestantes a mi alrededor me gritaban en la cara: «¿no ves lo que pasa? los pilotos de la fuerza aérea le comunicaron a Netaniahu que no van a enlistarse más en el ejército. ¡Y sin la fuerza aérea estamos perdidos! Y las relaciones internacionales de Israel con Estados Unidos y los demás países del mundo ¡nunca estuvieron peores! Bibi se está quedando solo, aislado, y nosotros por culpa de él vamos a pagar el pato. Porque sin el apoyo de EEUU, ¿de dónde vamos a sacar armas para defendernos?».

Palabra más, palabra menos, me enfrentaba día a día a ese discurso sin más que mis convicciones para refutarlos.

En mi opinión, las manifestaciones estaban llevando de las narices a la gente a la calle con otra agenda propia, que era la de voltear el gobierno de Bibi. Que si bien me gustaría, vamos… no exageremos que para lograr eso no me vas a sacar 45 sábados consecutivos a la plaza. Pongamos las cosas en su justa proporción. Mejor juntémonos a pensar una plataforma política y hagamos crecer a un candidato como la gente para ganar las elecciones, que creo que va a ser más útil.

Y llegó el sábado. Se olfateaba que Irán iba a atacar. Y la gente. Toda la gente. Lo vieron en el video que publiqué, estaba de paseo tomando solcito por todo el país. Nadie temía por los pilotos de la fuerza aerea, nadie temía por nada.

Y así fue: ni los pilotos se atrincheraron, ni EEUU nos escamoteó armas, ni el mundo entero nos dio la espalda. No solo EEUU sino Francia e Inglaterra. Y hasta Arabia Saudita y Jordania participaron en la defensa de Israel. ¿Lo podés creer? Claro que sí. Yo sí. Porque esas son mis convicciones. Porque yo respondía «¿Acaso de verdad creen que llegado el momento los pilotos no se van a subir a los aviones? ¿que EEUU no nos va a dar apoyo en caso de un ataque? ¿que es realmente el fin de Israel como país?» Y a todos los que me decían que sí, bueno, este es el momento de decir «Josi, tenías razón. Nos equivocamos».

Cuando las papas queman, todos dejan su agenda de costado y hacen lo que tienen que hacer. Y quienes están culpando al gobierno por todo lo malo que pasa desde el 7-10, en vez de agradecer estar vivos y poder mandar a sus hijos al colegio todos los días, siguen con la venda en los ojos, siendo parte del rebaño al que llevan de las narices a cumplir con los objetivos de otra gente. Y no me pregunten a qué me hace acordar eso, porque me deprimo.

Am Israel Jai!

Guerra con Hamás – Día 191

Y ahora qué pasa ¿eh?

Cuando pasó el temblor, hay que parar la pelota y pensar mejor. Porque es el eterno ejemplo del arquero. Si el arquero ataja, nadie lo felicita porque esa es su función. Y con atajadas no se gana un partido. A lo sumo no se lo pierde. Pero hay que ser más justo con el arquero. Hay que felicitarlo porque pudimos haber sido goleados de no ser por sus guantes. Y las Fuerzas Aéreas de Israel, ayer se zarparon. Hicieron un trabajo impecable. 99% de lo que Irán disparó, fue interceptado incluso antes de que entren en cielo israelí. Los aviones israelíes hacían paseos por medio oriente como se les cantaban las pelotas. Y hay que tener dos muy grandes para agarrar un F-35 y salir a volar por encima dle líbano o siria eh! Y lo hicieron.

Ni siquiera tuvimos que dormir en los refugios. ¡Nos estaba atacando Irán! ¡No es poca cosa! Y sin embargo… acá estamos… con una anécdota para contar.

Ahora todos se preguntan: ¿hay que responder o no hay que responder?. Porque a rigor de verdad, nosotros tiramos la primera piedra y lo de ellos fue el retruco. Nosotros les matamos al kía ese en Siria y por eso respondieron. La pregunta que se hacen todos es si cantar el quiero vale cuatro.

Por el momento, en Irán, están con el cielo cerrado de aviones, con al gente cargando nafta a lo loco y viendo qué pasa. Mi modesta opinión es que hace rato se decidió ya que no se va a responder, pero que se están haciendo los que lo están pensando para que los iraníes tengan un poco de cagazo. Para que tomen un poco de la medicina que nos hicieron tomar a nosotros. Aunque si mirás en el pasado, Israel y su fuerza aérea ha tenido el coraje de volar el centro atómico de Irak. Sería glorioso para la historia de este mundo que lo hagamos con Irán. Porque a pesar del hecho -nada despreciable- de haber colaborado EEUU, Inglaterra y Francia en esta defensa de Israel, lo cierto es que «si no actúo yo para mí, ¿quién lo hará?», como dice el poema.

Israel ganó mucho por caracter transitivo en que en Gaza no pueden subirse a ningún caballo de victoria después del ataque de Irán. Quedaron como unos peleles que no pueden ni hacernos cosquillas, y ahora hay que volver a la rutina de terminar de decidir cómo se resuelve lo de Gaza. Sinwar volvió a rechazar la propuesta de intercambio de rehenes y uno ya piensa de nuevo en el chiste del elefante y la hormiguita. Y sabiendo que a la hormiguita no la va a venir a defender ningún león iraní, habría que poner segunda y tomar las acciones. Ya estamos un poco agotados de tanta película de acción a nuestro alrededor.

No dejo de pensar cómo se llamará a esta guerra en el futuro y cada tanto digo… quizás en 9 días pasa algo que termina con el conflicto y se llamará «La Guerra de los 200 días». Pero ya pasó con los 50 y con los 100 y nada, che. No sé en qué número va a parar. Esperemos que no sea las mil y una noches por lo menos.

Guerra con Hamás – Día 190

¿Y Dónde Está el Piloto?

Bueno, finalmente ocurrió. Irán atacó a Israel en forma directa, sin caretas.

Hablemos brevemente de terminología y números:

185 Drones con 50 kilos de material explosivo cada uno. Vuelan solos.

110 Misiles Balísticos. De esos que se disparan apuntando a un lugar, y caen donde caen.

36 Misiles teledirigidos. De esos que los van manejando con control remoto para elegir dónde caer más precisamente.

¿Lo que pasó? Tanto Israel como EEUU, como Inglaterra y la mismísima Jordania, desde bases diversas, lanzaron aviones y misiles defensivos que lograron evitar que los drones y los misiles teledirigidos siquiera entren en territorio israelí. Es decir: los explotaron en el aire sobre territorio sirio o iraquí. Solamente un misil balístico perpetró un daño leve en una base militar israelí en el sur. Todos dormimos en la cama, normalmente, no hubo siquiera alarmas en el medio de la noche y gracias a un sistema de defensa coordinado y efectivo, la respuesta iraní, no causó más que motivos para hablar en televisión por otros tres meses.

¿Qué es lo que pasó? Pasó que Irán se vio obligado a responder el ataque israelí en Siria que eliminó a un alto jefe de la Guardia Revolucionaria Iraní. Y no solo eso, ya que Israel , en silencio durante los últimos años, estuvo atacando en territorio iraní, sin que uno lo admita y el otro lo denuncie. Porque uno no quería que lo hagan responsable, y el otro no quería que se sepa, porque prefería comerse el mazo.

Esta vez no. Irán dijo basta y -ante las burlas de su propia gente que decía que tenían miedo de contestar- respondió con un ataque que sabía que no iba a causar gran daño. Incluso lo había anunciado! Dijeron antes de atacar, que su respuesta no iba a causar escalada de violencia en la zona. Como diciendo «mirá… no puedo dejar pasar esto. Te tengo que tirar con algo. Pero tranqui… no es para tanto». Y así fue. Dispararon desde territorio iraní, sirio, libanés e iraquí.

Lo bueno: la coalición contra el eje del mal, funcionó. Otros países que venían tirando la bronca contra Israel por lo acontecido en Gaza los últimos días, a la hora de los bifes, hicieron lo que tenían que hacer. Lo bueno? que de nuevo Israel vuelve al lugar de víctima ante los ojos del mundo entero, y eso permite rearmar la defensa ante un posible conflicto zonal. Lo bueno? El ejército recupera puntos de credibilidad antes la gente y ante el mundo árabe. Lo bueno? que Irán anunció que desde su punto de vista, ellos terminaron. Mirá que buenos que son que hasta te avisan.

Lo que viene? Israel tiene que decidir si responde o no. Si no lo hace, deja como precedente que a partir de ahora Irán puede atacar y que no pasa nada. Que eso vale. Que lo que antes hacía desde otros países y bajo otros organismos, ahora se hace sin disimulo. Pero si responde, solo Dios sabe a dónde nos lleva esto. Yo pedí(?) hace un par de semanas que esto pase, a fin de que de una vez por todas se arme la podrida, que armemos la WWIII y que terminemos con esta cantinela eterna del Medio Oriente. ¿Pasará? Estados Unidos dice que si Israel responde, no van a estar de nuestro lado. Pero, como siempre les digo: nosotros no sabemos nada. Así como dicen algo puertas afuera, quizás Biden, que dialogó largamente con Bibi esta noche, le dice «vos tirá que yo hago de cuenta que te reto».

Algo menos probable, pero sería lindo que ocurra, es que la gente en Irán se levante y haga uan contrarrevolución. Teniendo en cuenta que solamente el 20% de la gente vota en las elecciones en Irán, quizás la gente, como siempre digo también sobre Gaza, puedan ser capaces de levantar la cabeza y decir «basta». Porque ya en estos momentos el precio del petróleo se disparó en Irán, y eso equivale a que el dólar en Israel salte de 3.4 a 12 shekel en una noche. Un desastre económico. La gente la va a pasar mal en el corto plazo. ¿Las importará? ¿Tendrán el apoyo externo y el valor para salir a la calle? Recordemos que de esto hablamos hace un tiempo. La respuesta puede y debe estar en su propia gente, que es amplia mayoría.

Israel ahora está en reuniones decidiendo qué hace. En la guerra del Golfo le dijeron que se quede tranqui y no responda. Y finalmente EEUU se cargó a Sadam Husseim y su amenaza permanente sobre Israel. Y uno está tan podrido de esto, que sueña con que la historia ahora se repita con Irán, y que vuelva a ser un país normal como antes de la Revolución Islámica de 1979. Amén.

Guerra con ¿Hamás? Día 188

¿Irán o Vendrán¿

No voy a escribir un post serio sobre el ataque «supuesto» de Irán, porque todo eso ya se tornó en un chiste.

Es como cuando un hermano grande le pega la mas chico, y viene el papá y para que el chico deje de patalear, le dice «bueno, pegale vos a él ahora», y le pega.

Ya se sabe que es de acá a 48 horas. Se sabe que son 100 misiles. Se dice que va a ser en la zona del golán o de Gaza(?).

Falta que hagan check-in y que saquen pasaporte para que les podamos hacer una bienvenida.

Esto más que Guerra Fría es una payasada.

Ojalá que sea todo como lo dicen y que no pase a mayores. Aunque si eso pasa, la capacidad de amenaza de Irán se va a los caños. Aunque no hay que dormirse porque quizás es lo que buscan. Que pensemos que se les puede mojar la oreja con facilidad.

Mi opinión sobre eso, que vale dos centavos de verdad, es que Irán de verdad no es el cuco que dicen. Es más un cuco inflado por EEUU, que se quedó sin Clasico para jugar el domingo cuando Rusia se vino abajo. Los iraníes mismos deben estar pensando cómo hacer para mantener vigente la «imagen de malos» que tienen en el mundo, cuando en realidad, ni en pedo se meten en una guerra que ataque sus territorios de verdad.

Guerra con Hamás – Día 184

El Hambre y las Ganas de Comer

O el muerto se ríe del degollado. Ayer mismo lo escribía acá, y hoy en una encuesta de Canal 12, que es bastante anti-bibi, podemos ver que la calle confirma lo que digo.

La gente a mi alrededor me dice «bibi actúa para defender sus propios intereses». Pero la calle dice Gantz 32 mandatos y Lapid 15, contra 19 de Netaniahu. Es decir… Lapid y Gantz no son lo suficientemente maduros para ver el bien mayor, que es derrotar a Netaniahu y unirse. Cada uno pelea por su propia posición, perdiendo de vista el objetivo principal. Un par de pelotudos son ellos, los que defienden sus propios intereses. Parece que no entendieron todavía cómo funciona y usan mal el conocido dicho. Para ellos es «Dividamos y No gobernaremos». Como si tuviesen cagazo de ser primer ministro.

La gente me dice «el país entero quiere que bibi se vaya». Pero la calle dice que ve a Gantz como primer ministro en un 45% y a Bibi un 39%. Estan cabeza a cabeza y con Gantz cayendo semana a semana.

Como verán… lo que dice la gente dista de ser lo que van a decir las urnas. Y eso que no estamos hablando de la encuesta de Canal 14, que es el canal del oficialismo.

Conclusión: La Oposición sigue meando afuera del tarro. Y lo peor es que la calle lo sabe.

La próxima manifestación, si realmente se quiere destituir a Netaniahu, tiene que ser en la puerta de la casa de Lapid, y no en ningún otro lado. ¡A despertarse, ñoños!

Guerra con Hamás – Día 183

Seis Meses. ¿Y ahora?

Hace seis meses que empezó la guerra. La luz al final del túnel, no se ve. Y la gente, en mi opinión, no tiene una idea formada de qué habría que hacer. No es como en en mundial, que empezamos a decir «Sacálo a Lautaro urgente!» cuando se comió 3 goles hechos o lo agarraban en offside todo el tiempo. Acá noto que la gente está un poco perdida. Estamos. Lo único que se escucha es a mucha gente pidiendo y manifestando por «elecciones YA» para destituir a Netaniahu y sus secuaces.

Y aunque cueste, me gustaría que lean con objetividad lo que tengo para decir. Creo que estamos meando afuera del tarro. Y permítanme ser objetivo. Yo no voté ni votaré jamás a Bibi. Pero nosotros, la oposición, la seguimos pifiando.

En este momento, el problema más grande que tiene Israel, es que las grandes potencias del mundo, EEUU, Inglaterra, y hasta otros como Canadá, amenazan con dejar de proveer armas para continuar la guerra. Si eso ocurre, que le quede claro a todo el mundo: la guerra se acaba al instante. Y eso significa que los 133 secuestrados que aún siguen en Gaza, no van a volver ni mañana ni pasado mañana. Significa que nos quedamos sin poder ser quien pone la música en esta fiesta y vamos a tener que bailar al ritmo de… vaya uno a saber qué DJ.

Podemos culpar a Netaniahu de esas feas relaciones exteriores. Pero supongamos que mañana viene el genio de la lámpara y amanece Gantz siendo primer ministro. ¿Ustedes creen que a él sí le van a vender armas? ¿Ustedes creen que Gantz quiere terminar la guerra mañana a la mañana? ¿Ustedes creen que Gantz tiene una idea mejor de cómo encarar el plan militar o político en este momento? Bueno… el gran problema es que nadie lo sabe porque ni Gantz ni Lapid ni Benet ni nadie están diciendo qué es lo que harían en caso de ganar la hipotéticas elecciones que la gente reclama. Y eso a mí no me da tranquilidad.

Yo estoy pegado a las noticias 24/7. Veo a los familiares de los secuestrados en la TV yendo sin parar durante todos los días a los programas a hablar. A decir lo suyo. Y si bien no es muy diferente lo que dice cada uno, ni cambia de día a día, es importante para ellos ir, ir, ir y seguir yendo, para que ni vos ni yo nos olvidemos de lo que están sufriendo ellos o del infierno que deben estar viviendo sus familiares. ¿Y saben a quién no veo en las noticias no solo todos los días sino no los veo NUNCA? A Gantz, a Lapid y a Benet. La oposición debería estar yendo sin parar para decirle a la gente lo que quiere hacer, lo que debería hacerse, el Plan que tienen, que es mejor que el de Netaniahu. No sirve que vengan a la plaza de Kfar Saba a hablarle a las 25 mil personas que sea como sea los van a votar. Eso es convencer a los convencidos, como se dice en hebreo. Lo que tienen que hacer es ir a ganar las elecciones desde ahora. Convencer a los que, de mediar el milagro de ir a elecciones, van a volver a votar a Netaniahu. Y lamentablemente, creo que no van a los medios porque no tienen un plan. No saben qué harían diferente. Y si lo saben y se lo están guardando en vez de sumarse al gabinete de emergencia, entonces son ellos los antipatriotas que dejan que sus magníficas ideas queden en un cajón cuando podrían estar salvando a los secuestrados y devolviendo a cientos de miles de evacuados a sus casas y a una vida normal.

A los que exigen que el gobierno renuncie, quiero preguntarles cuántas veces vieron a un gobierno renunciar porque la gente se lo pidió o porque ellos mismos consideran que las cosas no le están saliendo. Yo conozco a uno: De La Rúa. ¿A cuántos jugadores conocen que pidieron no jugar en la selección porque no estaban jugando bien? El mismísimo Lautaro al finalizar el mundial dijo que no llegó bien físicamente. Pero el decoro de pedirle a Scaloni que lo saque, no lo tuvo. Siguió con el arco cruzado sabiendo que son 7 partidos y esa mala racha podía costarnos un mundial. Y sin embargo no renunció a la titularidad.

Josi, no te podés quedar de brazos cruzados. No. Claro que no. Lo que yo digo es que en este momento, lo que el pueblo tiene que hacer es ocuparse de lo más urgente: es ir a manifestar no a Kaplan sino a la embajada de EEUU, de Inglaterra, y de Canadá. Demostrarles que a este pueblo ya lo abandonaron en 1939 y dejaron que maten a 6 millones. Y que el NUNCA MAS es YA. Que no es momento de volvernos la espalda. Porque si lo hacen, ya no va a importar si hay o no elecciones.

El jueves pasado volvieron a caer misiles sobre Ashkelon y Sderot! ¿Vos te das cuenta? ¡Pasaron 6 meses y como si nada! ¿Vos te mudarías a Sderot si mañana termina la guerra como Biden pide. Estamos en pelotas.

No seamos inocentes. Probablemente Biden se sienta obligado a tener un discurso pacifista puertas afuera porque en menos de 9 meses hay elecciones en EEUU, pero lo que le dice a puertas cerradas a Bibi no lo sabemos ni vos ni yo. Y quizás esa «desobediencia» de Netaniahu no es tal, y lo que le dijo el viejo Joe es «yo voy a salir a decir tal cosa, pero vos seguí que igual te mando los misiles y las armas».

Este es un post desordenado, pero hay muchas cosas importantes. No seamos fanáticos y pensémoslas de verdad. No se puede defender a la selección después de dos partidos tan malos como Arabia Saudita y México. Se puede tener fé. Se puede querer ganar el mundial. Se puede tener esperanza. Pero no se puede ser fanático.

Hace falta un pueblo unido. Hace falta una oposición que abra la boca. Hace falta una oposición que hable para todos. Hace falta presionar al Mundo Entero para decirles que esto no tenía que volver a pasar y pasó, y que es momento de tomar partido de verdad por nosotros. Y hace falta hacerle sentir al ejército que el pueblo está detrás de ellos apoyándolos. Porque primero está lo primero.

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Guerra con Hamás – Día 178

Mojando la Oreja.

Flor de pausa me mandé en las crónicas de la guerra. Aproveché el viaje a Uruguay por trabajo para estar seguro de que cuando volviese, habría un montón de cosas para comentar. Pero no. De reojo seguía viendo que la cosa está parada. La negociación de la liberación de los rehenes no avanza. Podrán culpar a Hamás o al Gobierno. Lo mismo da. Si Netaniahu hubiese aceptado lo que le pedían, que un poco más era que le lustre los zapatos a Sinwar, después -un par de años después- le iban a reclamar que liberó a miles de terroristas al igual que las valijas de dólares que le pasó a Hamás en el pasado. Todo se mira desde otro punto de vista con el paso del tiempo y se da vuelta como una tortilla. Como una persona que está feliz y se ríe todo el tiempo y al cabo de un par de años se le reclama que se toma todo parta la chacota y que no se puede hablar en serio con ella.

Por lo menos, lo que se aprovechó mientras las negociaciones seguían fue a meterse en el hospital Shifa, al cual ya había entrado en el pasado el ejército y, como dije en pasadas crónicas, al irse los soldados, las ratas volvieron a tomar el lugar más seguro que tienen. Pero Israel no se comió el amague y entró de nuevo con todo. Liquidó a 200 terroristas que se atrincheraban adentro y volvió a ganar puntos.

Y cuando pensé que solamente eso había pasado en todos estos días, sobre la hora Israel atacó en Damasco, capital de Siria, el Consulado Iraní, matando a uno de los altos mandos de la Guardia Revolucionaria Iraní, Mohammad Reza Zahedi. Y lejos de ser como en otros casos en los que los que reportan son los medios extranjeros y se «supone» que fue Israel pero el Gobierno local no se hace cargo, acá salieron las noticias en carteles gigantes anunciando la acción de inteligencia de Israel, sin negarlo ni ocultarlo. Pavoneándose incluso de la precisión con la que llevó a cabo el ataque, sin tocar la embajada de Canadá, pegadita a la Iraní. Fanfarroneando.

Irán, que junto con Hezbollah se han pasado la vida amenazando a Tel Aviv, no han pasado aún la verdadera linea roja. Si bien han bombardeado el norte de Israel, si bien atentaron en Argentina dos veces contra entidades judías y si bien a mucha gente le arruinaron la vida, lo cierto es que no han sido más que bocones que ladran pero no muerden. El mandato proxy que hacen con Hezbolláh para que ataquen desde el Líbano para disimular que son ellos los que verdaderamente atacan, ha dejado de ser ya un disimulo. Ya todos saben. E Israel ya no oculta que yo sé que tú sabes que yo sé. Y le mojó la oreja brutalmente a Irán.

La pregunta que nos hacemos todos es una sola: ¿Irán o no Irán a responder? Quizás esta sea la patada inicial de una terrible guerra mundial – que en su momento propuse, por decirlo de alguna manera, como la única forma de solucionar de una vez y para siempre este rincón tan sufrido del planeta- o quizás vuelva a dejar a Irán garpando y quedando como un bocón. Me preguntarán «¿te parece gracioso como para estar haciendo chistes, pedazo de pelotudo?» Y me banco la parada. Sí. Me parece. Porque ya me cansé de todo y quiero vivir en paz. Y para una buena paz, parece que nada mejor que una buena guerra. Decíselo a Japón. Decíselo a Alemania. Y ojalá que se lo puedas decir a Irán.

Guerra con Hamás – Día 162

La estamos cagando.

Cuando teníamos los misiles de Hamás cayendo sobre nuestras cabezas, estábamos todos unidos bajo una misma consigna: «defendamos nuestro hogar». Los políticos de la oposición rápidamente se sumaron a la coalición gobernante formando un gabinete reducido de expertos en temas militares. Porque había que poner a los mejores de cada rubro en la cancha. Era como cuando Maradona y Caniggia (uno de River y uno de Boca) se tenían que juntar para hacer ganar a la Albiceleste.

Pero ahora que las cosas se calmaron -para algunos solamente, porque no dejamos de pensar en los secuestrados y sus familias, en los evacuados y en las miles de personas que perdieron a alguien en esta guerra-, los políticos vuelven a cagarla.

La gente se caga de frío los sábados a la noche en ir a manifestar en diversas ciudades para que el gobierno renuncie y llame a elecciones. En todos los posts que hablamos sobre esto les pregunté a ustedes, los lectores, quién es el que reemplazaría a Bibi, y qué es lo que propone hacer diferente. Nadie me contesta nunca. Y no lo pregunto porque Bibi me guste o porque piense especialmente que lo que está haciendo está bien o mal, sino porque veo un vacío en la oposición que a mí me da muchísima más inseguridad. Como si fuese a venir algún improvisado a gobernar. Imagino a cuando uno se muda a un barrio nuevo y le cuesta un par de meses saber a qué almacén ir a comprar, dónde hay un tipo que arregla zapatos o en qué lugar las facturas son más ricas. Mientras eso pase, la guerra va a seguir en punto muerto, hasta que alguien se despierte. La oposición, hoy, sigue dormida viendo como la gente se caga de frío manifestando por ellos.

Y para peor, Guidon Saar, por poner un ejemplo, rompió su alianza con Gantz, que podría ser el candidato hoy en día con más apoyo popular. Entonces, seguimos sin aprender nada. Lapid, Gantz, Saar, ¿quién más? No quieren a su vez dividirse todavía más? ¿La, Pid, Ga, Ntz, Sa, Ar? ¿Por qué no lo llaman a Benet también para que arme otro partido más? ¿Y Barak? Sigan dividiendo a la oposición mientras Bibi sigue con su piso de electores intacto y gana caminando las elecciones una vez más.

La coalición gobernante no se soporta internamente. Se odian unos a otros. Pero son vivos. Saben que si se desarman y llaman a elecciones, no van a volver a ganar de la manera en la que lo hicieron la última vez. Van a perder los puestos que ganaron y se acabó. Cosa que cuando Benet fue Primer Ministro no supieron entender, y en vez de poner por encima de todo «quedarse unidos en el Gobierno», duraron un mísero año y dejaron que se desarme la coalición llamando a elecciones de nuevo para que vuelva el quetejedi de siempre.

Si para algo habría que salir a manifestar es para reclamar que la oposición se una y se deje de joder. A esa manifestación voy a ir de cabeza. Con cornetas y todo. Pero primero, hagan los putos deberes.

Guerra con Hamás – Día 157

Los Planes.

Si miramos para atrás, tenemos en el pasado más reciente, la Guerra del Líbano (1982), la Segunda guerra del Líbano (2006) y después enfrentamientos menores a los que no se los consideró guerras sino «operativos». Hay una definición que establece el gobierno y según la cual, se opera de tal o cual manera y eso depende de si se define como guerra o no lo que está pasando. En este caso, velozmente el Gobierno declaró que estamos en guerra y así se actuó. Pero a diferencia de las del Líbano, que duraron decenas de días, acá ya estamos frente a algo que la historia todavía no le puso el nombre. Ya van 157 días, camino al medio año de guerra y las cicatrices que esto va a dejar en la sociedad, todavía no las estamos apreciando del todo.

Y para agregar condimentos, y tal como si fuesen los planes de las vacaciones de verano, ya no es secreto que para Mayo empieza la guerra en el Líbano. Uno puede suponer que si eso ya está planificado, es porque en el sur las cosas se piensan calmar para esa época y disponer de los recursos para limpiar de enemigos la amenaza del norte.

Recién releía que -al menos en el análisis escueto de Wikipedia- decía que como consecuencia del vacío que dejan los palestinos vencidos y echados del sur del Líbano en la guerra del 82, nace Hezbollah. Y así, en determinado momento también nació Hamás en Gaza. Fácilmente vemos como estamos de mal en peor y no podemos sino preguntarnos si semejante destrozo causado en esta guerra por el Ejército de Israel no va a dar comienzo al nacimiento del algo peor que Hamás. Es increíble porque no estamos hablando de un chico al que las malas experiencias lo hacen aprender que «eso no se hace». Acá estamos frente a un enemigo que dice «ahora lo hago de nuevo y peor». Entonces hasta te logra confundir y hacer pensar que por ese camino no vamos a lograr nada. Y si te agarran desprevenido, entonces podés equivocarte y pensar que mejor no atacarlos. Pero leyeron bien. Dije que eso haría Israel si se equivocase. Porque no se puede quedar de brazos cruzados.

Entonces… ¿cuales tendrían que ser los planes? A riesgo de repetirme y para que no nos olvidemos lo vuelvo a escribir: hay que aislar a los palestinos de sus amigotes en el barrio. Cuando no pueda venir a hacerse el guapo sabiendo que tiene al grandote de la otra cuadra o al pibe chorro del edificio de al lado, otro va a ser el cantar. Si no se puede llegar a un lugar por el camino directo, entonces hay que dar la vuelta y entrar por el fondo. Como esas películas que primero te muestran el final y después van desandando el camino hacia atrás.

Israel tiene que lograr firmar la paz con los asociados a los palestinos. Tiene que encontrar la manera de que a esa gente le convenga más eso que apoyar a Hamás. Tiene que lograr (por la vía económica, claro está) que Arabia Saudita llegue a un punto en que diga «má sí… a la mierda con Hamás!». Uno quiere confiar en que eso está ocurriendo tras bambalinas. Yo tengo fé, como decía Palito Ortega, que se está haciendo. No sé si Netaniahu o si alguien más. Por el momento no se escucha mucho y creo que eso es un buen síntoma. Hay que salir a comunicarlo cuando ya esté todo cocinado, para que nadie con intereses encontrados pueda interponerse.

Yo no veo otro camino. Si alguien tiene ideas; si los tan enojados opositores de Bibi tienen alguna idea diferente, me gustaría que la comenten. Si para algo deberían servir las manifestaciones de los sábados, es para proponer caminos alternativos, y me gustaría escuchar cuales son. Porque si no sos parte de la solución, pasas automáticamente a formar parte del problema.

Guerra con Hamás – Día 151

Seriedad.

Hoy no iba a escribir nada. Me senté frente a las noticias luego del período más largo del día en el que no leo nada, que son las 6 horas que duermo a la noche. Cuando me despierto y voy a los diarios tengo esa esperanza loca como cuando sé que San Lorenzo jugó a la noche y al levantarme imagino que abro los diarios y dice que ganamos. Y ahora todas las mañanas espero abrir la tapa y ver un font de tamaño que todavía no se estrenó en Israel y que se lo deja para ocasiones que todavía no han ocurrido, y que lo usan por primera vez para decir que agarraron a Siwnar vivo.

Pero no. Esta noche no ocurrió. Quizás me lo están reservando de regalo de cumpleaños. Falta poco.

Lo que leí, que me hizo enfurecer y venir a descargarme escribiendo estas líneas es el pedido de Estados Unidos de que Israel empiece un cese del fuego ANTES de las negociaciones por los secuestrados, para demostrar seriedad.

Esperen un segundo que voy a leer de nuevo para ver si no leí mal porque no puede ser que alguien haya propuesto semejante barbaridad.

Ahí lo tienen. Es de verdad. Como si Israel tuviese que demostrar seriedad. Como si Israel no hubiese cumplido hasta ahora con todo lo pactado. Como si Israel no hubiese tenido que tragar saliva y negociar con terroristas cuando ningún país del mundo negocia con terroristas -y muchísimo menos Estados Unidos-. Como si en los intercambios de rehenes de noviembre hubiese sido Israel el que demoró los procesos al no dar las listas de nombres, al no aprobar en forma caprichosa, al no entregar a los niños y mujeres a pesar de que eso era lo pactado. Como si Israel no hubiese entrado los camiones con ayuda humanitaria como se pactó y aún mucho más que eso.

¿Quieren que Israel demuestre seriedad? ¿Qué tan serios quieren que seamos? ¿Serios como lo que fue Hamás el 7-10? Porque si a mi me dicen que responda con seriedad al ataque del 7-10, y después de esta escupida en la cara, no queda nadie con quien negociar del otro lado. ¿Viste cuando tenías piojos en la primaria y te ponían ese líquido con un olor horrible en el pelo para que no te pique y matar a los piojos? Estoy seguro de que si tenías 35 piojos, solamente eran unos 18 a 20 los que te hacían picar la cabeza. Otros estaban ahí nomás, tiraditos en el pelo, descansado. Pero cuando hubo que reaccionar, le diste con el peine fino y el líquido mortal ese y no preguntaste uno por uno quién era el que estaba rompiendo las pelotas. Les diste masa a todos por igual.

¿Así de serios quieren que seamos? Están tirando del piolín terriblemente y hacen que gente como yo, que siempre tendió a soluciones pacíficas esté perdiendo la paciencia. No se olviden de que cuando mataron a Rabin, uno podía pensar que la sociedad iba a sensibilizarse y que iban a pisar el freno y girar hacia la izquierda y afianzar las ideas de Rabin, el pacifismo y la mar en coche: todo lo contrario ocurrió. Fueron a elecciones y adivinen quién ganó por primera vez y se convirtió en Primer Ministro. Bibi Netaniahu.

Asi que sigan jodiendo. Sigan jodiendo que nos van a terminar cansando. Y el título de «el ejército más moral del mundo» lo vamos a quemar en la plaza de Dizengoff junto con los discos de los Beatles. All you need is love? Las pelotas.

Guerra con Hamás – Día 149

Ajedrez.

Algunos se habrán preguntado si se terminó la guerra que no escribí más. No. No se terminó. Pero es que nos están escondiendo las cartas. Los dos bandos. El nuestro y el de ellos. Y por un lado mejor, porque mientras Hamás juega a las escondidas y no responde si la propuesta del cese temporario del fuego a cambio de secuestrados es aceptado o no, si las condiciones le vienen bien o si van a rechazarlo, ni siquiera da la lista de los secuestrados que están vivos, y el Ejército de Israel sigue haciendo su tarea de limpieza de terrorismo de base en el sur de la Franja de Gaza. Podríamos pensar que si es por nosotros, que se tomen el tiempo que quieran, porque desde hace meses que el sur de Israel (Ashdod, Ashkelon, todos los kibutzim y demás) están llevando una vida normal sin cohetes que les lluevan, pero no podemos pensar eso porque en ese tiempo que pasa, hay 138 israelíes viviendo un infierno. Y no se los puede dejar ahí.

Entonces Israel presiona. EEUU presiona. Egipto presiona. Hasta Irán presiona. Pero Hamás no dice ni pío. Vaya uno a saber si no es porque Sinwar está desconectado de las milicias, como dicen, o si no estará muerto como se merece. Lo cierto es que en estos días Israel se dio el lujo de elegir autoridades municipales (intendentes y demás), se dio el lujo de empezar el ciclo lectivo en Sderot, una de las más castigadas ciudades en la vecindad de Gaza, se dio el lujo de debatir la ley del servicio militar, y hasta de debatir si la canción de Eurovisión que se presenta va a ser descalificada o no.

Sin embargo, y a pesar de toda esa necesidad de seguir adelante, uno se topa con historias increíbles de chicos de 20 años que perdieron una pierna en Gaza y se están recuperando y empezando a darse cuenta de que su vida a partir de ahora y por los próximos… ¡65 años! va a ser un poco diferente de lo que pensaban. Y te topás con familiares de secuestrados siendo entrevistados y te tratás de meter en su cabeza. Pensás qué harías en su lugar. Si imaginarías lo peor para no ilusionarte, o si mantendrías a la fuerza esa pequeña esperanza viva a riesgo de pegarte el porrazo con la triste realidad de la muerte llegado el caso. Si elegirías paralizar toda tu vida para hacer de la espera y la lucha por recuperar a tu ser querido una forma de vida, yendo de la Plaza de los Secuestrados a un colegio a dar una charla y de ahí a una manifestación en el Congreso y de ahí a un entierro y de ahí a una nota en un canal de TV y así.

Qué harías. Que es lo que harías. Así como en Pesaj la tradición sugiere que cada uno se vea a sí mismo como si uno hubiese salido de Egipto luego de vivir en la esclavitud, ahora todos deberíamos parar una vez al día como mínimo e imaginarnos que un ser querido está allí en Gaza, siendo una pieza en este ajedrez silencioso que ambas partes están jugando. Y sentir. Ver lo que se siente. Aceptar ese dolor. Porque se los debemos a todos los que les tocó en desgracia tener sus vidas a merced.

Guerra con Hamás – Día 143

Los Datos del 7-10

Hace rato les vengo diciendo que nosotros no sabemos nada. Ayer nos tiraron un par de migajas para que sepamos algo más. Y así va a ser de aquí en adelante. El ejército y el gobierno prometieron una investigación exhaustiva de lo que llevó a la tragedia del 7-10. Primero dijeron que sería al finalizar la guerra, pero como esto va para largo, la investigación ya empezó. Y no sueñen con que todos los detalles les sean revelados al público en general. Eso sería dar demasiada ventaja al enemigo porque implicaría descubrir muchísimas técnicas de información e inteligencia que se suelen usar al corriente y no quieren dar a conocer.

Pero aún así, hay información que sale a la luz. Lo primero fue la noticia de que la noche del ataque, cientos de teléfonos en Gaza se encendieron con SIM (chip) de la red celular israelí (en lugar de la de Gaza, que es otra separada). Lejos de pensar que nadie se habría dado cuenta de ese detalle, sí se dieron cuenta en Israel. Para que se vayan dando cuenta de que si bien todo salió mal esa noche, no fue porque algún boludo se quedó dormido o porque -como otros boludos dicen- hubo una conspiración interna en Israel que provocó el ataque, sino porque algún (boludo, quizás) tomó las decisiones equivocadas. Y ese detalle de las SIM, no era la primera vez que pasaba. Entonces no se tomaron medidas. Eso fue un error. Yo en mi trabajo (y en general en la vida) cuando veo un detalle que no entiendo por qué pasa, no me quedo tranquilo con decir «andá a saber». Si escuchás un ruidito en el auto y te hacés el tonto, te va a dejar a pie cuando menos lo esperes. Y acá alguien no investigó por qué a las 12 de la noche, CIENTOS de SIM se encendieron en Gaza.

Luego salen números más que interesantes. Dos noches antes (no un mes, no dos años, dos NOCHES antes) del ataque del 7-10, el ejército ejercitó (lindo jueguito de palabras) un simulacro de ataque similar al que ocurrió, pero en escala mucho menor: entrada por dos focos y cientos de terroristas. Lo que el 7-10 ocurrió, y ahora nos dan a conocer los datos, es que entraron por 60 focos diferentes, y fueron 3000 terroristas. Nadie imaginó semejante escenario y las fuerzas que llegaron a combatirlos (para todos los que dicen que el ejército no llegó por 5 horas al lugar y demás pelotudeces) fueron de 12 tanques y 600 soldados. Eso es prácticamente nada. Como tratar de ganar un partido sin arquero. La unidad «Tequila» del Shabak fue la que se enfrentó con los 3000, y sufrió caídas tremendas. Casi todos, según tengo entendido.

Otra de las cosas que se dieron a conocer es que la noche anterior se pidió que helicópteros de combate se acercasen a la zona para estar más cerca en caso de ataque, porque había señales. La respuesta fue negativa porque no quisieron quemar las fuentes de información que vienen desde Gaza que, al acercar helicópteros, pondrían en descubierto que Israel sabía que algo se estaba cocinando. Evidentemente esa decisión equivocada costó mucho más que lo que se quería proteger.

Falta mucha información todavía. Evidentemente hubo malas decisiones tomadas. Eso no lo va a poder negar nadie. Pero lo que en cierta forma a mí me tranquiliza (si se me permite usar esa palabra) es que no es que no sabíamos nada. Sí tenemos los métodos tecnológicos y de los otros para saber ciertas cosas. Solamente que subestimamos al enemigo y desatendimos las alarmas, que no fueron pocas. Hubo gente que fue llamada a cuarteles a las 12 de la noche antes del ataque. Hubo gente que analizó lo que se veía desde Gaza, y decidió que no era la magnitud de lo que pasó. Como un Tsunami la primera vez que ocurrió: ninguna defensa ni ninguna preparación fue suficiente. Había cierta rutina y cierta defensa, pero nadie se vio venir el Tsunami hasta que llegó por primera vez. Ahora ya sabemos.

Guerra con Hamás – Día 141

No sean pelotudos.

Parece que sin fútbol de por medio, no se entiende. Así que volvamos al fútbol: cuando en el Club Atlético Cabaret Juniors (aka Boca) saltan las vedettes (ocurre seguido) y el vestuario está que arde, los resultados futbolísticos no son buenos. Claro, porque si Riquelme no se habla con Palermo, menos le va a pasar la pelota y los goles no van a llegar.

En cambio, por ejemplo y de casualidad, recordarán a Los Camboyanos, aquel emblemático equipo de San Lorenzo de 1988, al que no le pagaban los sueldos, el que se llevaba las camisetas para lavarlas cada uno en su casa y demás. Se autodenominaron los camboyanos porque así, decían, se vivía en Camboya, donde tampoco tenían agua caliente para ducharse después del partido. Sin embargo, la unión de ese equipo lo llevó, con más ímpetu y ganas que fútbol, hasta la semifinal de la faquin Copa Libertadores. Un logro increíble para un club en esas condiciones.

Con esto quiero decir que el cantito famoso de «el pueblo, unido, jamás será vencido» es tan cierto como que yo soy de San Lorenzo. Y ayer empezaron a olvidarse de la importancia de estar unidos. Manifestaron en Kaplán, pleno Tel Aviv, como los 40 sábados antes del 7-10, pero con dos detalles: el primero es que cada manifestación tiene que tener autorización de la policía y ésta no la tenía; el segundo es que manifiestan ya no por los secuestrados (eso ocurrió en la Plaza de los Secuestrados, en otro lado) sino en contra del gobierno. Y de postre, intentaron cortar la autopista (como ya lo hicieron antes de la guerra) y la policía salió con los hidrantes para que todos se puedan sacar la foto de la víctima toda mojada. A mí eso no me conmueve. Tenemos una guerra en el Sur y soldados en el barro y la lluvia cuidando por nuestro bienestar. ¡Eso me conmueve!

Y lo que no se dan cuenta es que de eso lo único que causa, además de la división del pueblo que, en este momento clave de la historia, ayudar, no ayuda, es también que a Bibi eso en lugar de hacerlo reflexionar y levantarse un día y decir «bueno, está bien, renuncio», lo fortalece. ¿Por qué? Porque todos los votantes de Bibi, que son incondicionales y le dan siempre un piso de 33 mandatos sin importar el rival, se vuelven más firmes en su postura y lo apoyan aún más. Y los que andan girando indecisos y a veces votan Likud y a veces «otra cosa», no se convencen viendo a los manifestantes cortando las autopistas solo por exigir(!) que Netaniahu renuncie. Quizás hasta al contrario, porque puede parecer desubicado estar des-priorizando a los secuestrados en pos de «el mismo cantito de siempre».

Ni hablar que los que reclaman que Bibi se vaya no tienen ni idea de qué es lo que piensan que habría que hacer los demás «supuestos candidatos». No escuchás ni a Lapid ni a NADIE decir que lo que se hace está mal y que se debería hacer tal o cual cosa. Y si hay algún genio que sabe lo que hay que hacer y se lo guarda por si ganas las elecciones y queda como un salvador, y mientras tanto no le cuenta a nadie su movida milagrosa, entonces es un hijo de puta porque mientras escribo esto, más soldados caen muertos en Gaza.

Por lo tanto, si bien entiendo que a la gente, a todos, nos gusta expresarnos y protestar, creo que acá están en el lugar equivocado, en el momento equivocado, y pidiendo lo equivocado. Le hacen el juego a Bibi y le aseguran el sillón del gobierno para rato. Primero lo primero, como les digo a mis hijos siempre.

Sean vivos. Sean como San Lorenzo de 1988.