Guerra con Hamás – Día 56

Una discusión sobre pelirrojos y tailandeses.

He tenido discusiones con la gente y me encuentro solo en mi posición. La gente no concuerda con lo que digo. Veremos si alguien por acá coincide.

Israel llegó a tener 259 secuestrados. Dentro de ese grupo, en el marco de las negociaciones para su intercambio contra presos palestinos, camiones de ayuda humanitaria, combustible y el cese de fuego, se ha tenido que tener la frialdad de dividirlos en categorías. Por aquello de «mujeres y niños primero». Luego vendrán los hombres, luego los más jóvenes y, finalmente -y por exigencia de Hamás- los soldados, a quienes se resisten a devolver. Fuera de ese acuerdo han quedado los trabajadores tailandeses que suelen venir a Israel de a cientos a trabajar en agricultura en los kibutzim del sur. Hamás no está interesado en ellos y los fue liberando a cambio de nada. Tan idiotas fueron en llevárselos secuestrados, si no los encuentran culpables de nada en su retorcida mente terrorista. Pero al fin de cuentas, allí estuvieron 50 días y de a poco fueron volviendo.

Esos tailandeses vivían en los kibutzim y trabajaron durante años al mando de los dueños de los cultivos, y puedo apostar que tuvieron una relación de empleador-empleado como cualquier otra que conozcamos. Sabían sus nombres, sabían si tenían familia en Tailandia, o si sabían cocinar rico.

Sin embargo, el periodismo no se tomó la molestia de siquiera dar a conocer los nombres de los liberados. Los titulares parecían un chiste racista de Crónica: «Liberaron a 11 secuestrados y 5 tailandeses». Como si ellos no hubiesen estado secuestrados. Como si fuesen un detalle.

Y para rematar, tanto la sociedad como los periodistas mismos, están en vilo por la vuelta de los pelirrojos. Yo entiendo que son divinos, simpáticos, que hay un bebé y todo lo que quieran. Pero no se puede perder de vista que quedan 136 secuestrados, y no podemos empatizar con los colorados porque son más simpáticos. Podés tener tu favorito. Pudiste haber empatizado más con tal historia o cual de las muchas que se escuchan en la TV, de los familiares que van a contar cómo fue el último mensaje recibido el 7/10 o cómo eran esas personas hasta un día antes, o de cómo los están esperando ansiosos. Sí. Lo entiendo. Es humano empatizar más con uno que con otro. Pero no podemos ser tan selectivos a la hora de exigir la devolución de los rehenes. Siento que eso le falta el respeto a los demás. No me gusta y me disgusta escuchar a Yonit Levi diciendo que se recibió la lista de rehenes que van a ser liberados tal día «y los pelirrojos no están en ella». Es como decir… «nos mandan las sobras de fin de temporada».

Y con los tailandeses ni hablar, porque ni los nombres te listan.

Piensen en las familias de los secuestrados. Solo eso. Piensen que también hubo chicos de 4 años como Ariel, pero que no eran pelirrojos, y también estuvieron secuestrados. Hubo una tailandesa que tuvo su bebé en Gaza! ¿Alguién sabe cómo está ese bebé? Acá somos todos iguales. Familiares o no, chicos o no, israelíes o de doble nacionalidad. Cada vida cuenta y los queremos de vuelta a todos. A todos por igual.

Eso nomás.